A días de que comience la primera revisión de metas del acuerdo con el FMI que se realizará en mayo, el escaso monto de 160 millones dólares que compró en abril el Banco Central inquieta al mercado y siembra dudas sobre la posibilidad de cumplir la pauta de acumulación de reservas prevista para el segundo trimestre. Los economistas afirman que un incumplimiento presionará sobre los dólares financieros, que este mes cerraron con la mayor suba mensual desde noviembre de 2021.
El programa con el FMI contempla una meta de acumulación de reservas netas para este año de u$s5.800 millones. El ministro de Economía Martín Guzmán aseguró que se cumplieron las metas de acumulación de reservas, de déficit fiscal, y de asistencia monetaria previstas para el primer trimestre del año que serán monitoreadas por una misión técnica del FMI en mayo.
En ese sentido, los analistas estimaron que la pauta para el primer trimestre del año, que implicaba conseguir un aumento de u$s1.200 millones en las reservas con respecto al stock de diciembre de 2021, se consiguió cumplir en forma “ajustada”. Además, subrayan que se logró exclusivamente gracias al primer desembolso que el FMI concretó tras haber aprobado formalmente el nuevo programa con Argentina el 25 de marzo último.
El BCRA había cerrado marzo con un saldo comprador de u$s275 millones pese a la liquidación récord del agro a raíz del alza en el precio de los commodities por efecto de la guerra entre Rusia y Ucrania. Y se esperaba que la entidad monetaria mejorara esa performance en abril gracias al comienzo de la temporada alta de la liquidación de la cosecha gruesa. Sin embargo la dinámica fue peor ante la gran demanda de dólares del sector privado, especialmente por parte de importadores.
El Banco Central acumuló en abril compras por u$s160 millones, muy inferior a los u$s 1.373 millones de igual mes de 2021.
El BCRA terminó en la última jornada de abril con compras netas por u$s10 millones, con lo cual el saldo de intervención del mes fue comprador en u$s160 millones.
Así, la entidad monetaria acumuló en el primer cuatrimestre del año un saldo positivo de u$s110 millones.
Entre las causas del bajo nivel de compras de abril están que los incentivos que genera una tasa en pesos inferior a la del crawling peg, tanto en exportadores como en importadores, conspiran contra la acumulación de reservas. “Los exportadores se ven alentados a posponer la liquidación de sus granos ya que en el pase a pesos sólo pueden obtener un rendimiento menor. Y los importadores tienen el incentivo de endeudarse en pesos para adelantar sus compras”, señaló. También lo adjudicó al “factor estructural del atraso del tipo de cambio: el haber apreciado tanto en 2021 hace que los importadores dejen prácticamente con las manos vacías al BCRA”.
De igual mirada, la consultora LCG planteó que “la balanza comercial está mostrando un desempeño menos auspicioso para el resto del año a partir de una demanda de importaciones superior a la esperada, lo que se refleja en la poca capacidad del BCRA de capitalizar las divisas provenientes de una liquidación récord de la cosecha”. Y agregó: “Asimismo, la tentación de recurrir a los vicios tradicionales como el atraso cambiario para frenar la aceleración de la inflación vuelve a verse como un riesgo que puede traer consecuencias negativas para la meta de acumulación de reservas que, entendemos, no es negociable con el FMI”, sostuvo.
Asimismo, un análisis de la consultora 1816 juzgó que “al BCRA le está costando comprar porque hay más demanda de importaciones y porque hay más salidas por turismo”.