El Banco Central (BCRA) continúa con su política de llevar el ritmo de micro devaluaciones diarias del peso (crawling-peg) a un ritmo más acelerado mes a mes, en línea con lo acordado con el Fondo Monetario Internacional (FMI) a fin de “garantizar la competitividad a mediano plazo”. Para lograrlo, se estableció que la apreciación del dólar oficial, que ya cotiza por encima de los $117, seguirá el ritmo de la inflación.
Ese índice fue del 6,7% en marzo y del 6% en abril, según se conoció este jueves. Con una inflación interanual de 58%, la más alta en 30 años, la gran incógnita ahora es cómo evolucionará el tipo de cambio oficial.
Según se estableció desde el Gobierno, todo indicaría que el precio del dólar oficial debería estar acompañando los índices mensuales de suba de precios, tanto para mantener un nivel de tipo de cambio adecuado como para evitar un salto devaluatorio. Y, si bien desde diciembre del año pasado la aceleración del crawling-peg se viene dando, hasta ahora marca un ritmo mensual inferior a la inflación.