Según el último reporte del Ministerio de Salud, hasta el 10 de agosto, se confirmaron 49 casos de viruela del mono (símica) en la Argentina. Del total, 30 de ellos presentaron antecedentes de viaje fuera del país previo al inicio de los síntomas y 19 sin antecedente de haberse trasladado manifestaron haber tenido contacto sexual con viajeros o desconocidos/contacto estrecho de un caso confirmado. Los 49 son hombres, con una edad mínima de 24 años, una máxima de 53, y una mediana de 36.
De todas formas, el número de contagios en Argentina es “bajo”, si se tiene en cuenta que en Estados Unidos ya se contabilizan 12.635 pacientes confirmados; en España 5.792; en Reino Unido 3.201, en Alemania 3.186 y Brasil ya supera los 3.184 casos. El mundo computa 38.681 positivos, desde el 6 de mayo, según el rastreador estadístico Our World In Data.
En este marco, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) alertó, tanto en la voz de su directora, la médica salubrista dominiquesa Carissa Etienne como en la representante de la OPS/OMS en Argentina, Eva Jané Llopis y en la ministra de Salud argentina, la sanitarista Carla Vizzotti, sobre la rápida expansión de la viruela símica, tras haber sido golpeados por una pandemia que se llevó, lamentablemente, “a más de 3 millones de almas” en todo el mundo.
La advertencia se dio en el marco del Taller Regional “Lecciones aprendidas durante la pandemia de COVID-19. Preparación y respuesta a pandemias causadas por patógenos respiratorios” que comenzó este miércoles en el Hotel Meliá del microcentro porteño. Alí estuvo presente A24.com en la apertura del importante evento, en donde equipos interdisciplinarios de ministerios de Salud de 11 países de la región compartieron sus experiencias de cuando estuvieron abocados a la respuesta a la pandemia de COVID-19.
Según contaron desde la OPS a este medio, el encuentro permitirá a los países preparar planes operativos para enfrentar pandemias causadas por patógenos respiratorios, considerando la alta probabilidad de que sucedan a futuro, y recuperando las lecciones aprendidas de la COVID-19.
Los expertos coincidieron en que resulta imprescindible contar con un plan de preparación y respuesta a eventos con potencial epidémico y pandémico. Se trata de una de las capacidades básicas requeridas por el Reglamento Sanitario Internacional (RSI), un convenio internacional jurídicamente vinculante adoptado por los Estados Miembros de la OMS para prevenir y responder a los riesgos agudos para la salud pública que puedan atravesar las fronteras y amenazar a las poblaciones de todo el mundo.
Además, lo producido en el marco del taller integrará la visión de la región de las Américas en los documentos y guías globales de preparación y respuesta a pandemias. Las delegaciones de los ministerios de Salud de Argentina, Bolivia, Colombia, Costa Rica, Guatemala, El Salvador, Haití, Honduras, Paraguay, Surinam y República Dominicana, están conformadas por referentes técnicos en vigilancia epidemiológica, laboratorio, inmunizaciones y comunicación de riesgos.
En las palabras de bienvenida, la representante de la OPS en la Argentina, Eva Jané Llopis, resaltó que “la pandemia por COVID-19 no terminó y está lejos de terminarse. En este marco, tuvimos que revisar de un día para el otro los procedimientos con los que trabajamos, y ahora, en este complejo escenario se suman el cambio climático y la viruela del mono, creciente amenaza sanitaria”.