En Suripujio, unas 70 vicuñas fueron esquiladas para el aprovechamiento sustentable de su fibra en el proceso ancestral conocido como “Chakus”.
El Ministerio de Ambiente y Cambio Climático de Jujuy, a través de la Secretaría de Biodiversidad y Desarrollo Sustentable, acompaña los procesos de esquila sustentable de vicuñas en silvestría conocido como “Chakus”, que llevan adelante las comunidades andinas manejadoras de vicuñas (CAMVI).
Se llevó a cabo el segundo Chaku en la Comunidad Originaria de Suripujio, dentro del cronograma de 4 chakus estipulados para la temporada 2022 para la zona.
Alrededor de 100 personas de las localidades de Inticancha, Quirquinchos, Larcas y Suripujio, participaron del proceso, con trabajos coordinados que permitieron llevar a cabo una excelente jornada de esquila sustentable de vicuñas.
Al respecto, la secretaría de Biodiversidad y Desarrollo Sustentable, Estefanía Sánchez Cuartielles, expresó que la Secretaría a su cargo lleva adelante la fiscalización del proceso para certificar el bienestar animal de esta especie protegida con un gran equipo de profesionales que acompaña a las comunidades.
Por su parte, el director de Protección a la Biodiversidad y Áreas Protegidas, Daniel Zenón, comentó que este proceso se llevó adelante en dos días, en donde alrededor de 10 equipos de trabajo se apostaron en distintos puntos elevados del lugar comandados por la CANVI, realizando un embudo a través de una malla móvil para guiar a las vicuñas al corral de encierro.
El proceso de esquila sustentable de vicuñas en silvestría comienza con la captura de la vicuña en el corral y una evaluación de cada ejemplar para determinar si es apta o no para ser esquilada. Cada vellón que se aprovecha tiene un número de seguimiento para saber de qué vicuña se proviene. Estas prácticas ancestrales previenen la caza furtiva de esta especie protegida.
Participaron, además, equipos de la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Jujuy.
La esquila sustentable de vicuñas conocida como “Chakus”, se trata de una actividad ancestral en la que las poblaciones de la puna jujeña integrantes de la CAMVI (Comunidades Andinas Manejadoras de Vicuñas) recolectan la fibra de vicuña para su aprovechamiento comercial.
Este año se tiene previsto realizar 40 chakus en diferentes localidades de la puna, intentando generar una mejora en la cosecha récord de fibra del 2021. Alrededor de 20 chakus se han realizado hasta la fecha, con una cosecha de fibra aproximada de 500 kilos.