Marcelo Orrego venció a Uñac y a Gioja. Horacio Rodríguez Larreta celebró en el escenario con él junto a otros dirigentes, entre ellos, Martín Lousteau. Los candidatos libertarios volvieron a decepcionar. Claves políticas de un triunfo que se proyecta al ámbito nacional.
La victoria del candidato de Juntos por el Cambio, Marcelo Orrego, en las elecciones a gobernador de San Juan representó un batacazo, por lo inesperado de la derrota de un peronismo que hacía 20 años controlaba la provincia, y por la distancia entre el ganador y sus competidores. Pero también representó la victoria de un formato de construcción político-electoral que se proyecta a la interna nacional que protagonizan Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich.
Se trata de una luz roja para el peronismo, en momentos en que las distintas líneas internas parecen confluir detrás de la candidatura de unidad en Unión por la Patria de Sergio Massa-Agustín Rossi y un sector del ultracristinismo, de la que encabezan Juan Grabois-Paula Abal Medina. Es que el gobernador Sergio Uñac no logró imponer a su hermano Rubén, y perdió ante su rival permanente, el diputado y ex mandatario José Luis Gioja.
“El de Marcelo Orrego es el triunfo del trabajo. Pero sobre todo es el triunfo del cambio, después de 20 años de peronismo. Como ocurrió en San Luis, acá también. Los sanjuaninos quieren un cambio y ya lo veníamos viendo. Trabajamos juntos hace varios años. Recorrí con Marcelo varias veces la provincia y lo notábamos. El tercer factor es que se trató de un triunfo del concepto de sumar, de ampliarnos”, dijo Larreta