Si bien hay una buena noticia de cara a los próximos meses en términos de lluvias en las zonas más importantes de la producción agropecuaria del país, esto mismo podría provocar un fuerte aumento de los precios de la carne, que en las últimas semanas registraron alzas de entre 15 y 20%, según diferentes fuentes de mercado.
En el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) el asado en carnicerías aumentó de unos de $3.100 a poco más de $3.600 el kilo, poco más del 16%. Sin embargo, los aumentos superaron el 20% en cortes como matambre y tapa de asado.
Según Víctor Tonelli, uno de los consultores más respetados del mercado de la carne, las lluvias fueron el factor más determinante de los tres que contribuyeron a la nueva escalada. El primero de ellos fue la incertidumbre sobre el resultado de la elección presidencial, tras el antecedente de que después de las PASO el gobierno había decidido una devaluación que llevó a los productores a esperar.
El segundo elemento fue que después de las elecciones el gobierno anunció un nuevo Programa de Incremento Exportador (PIE) para todas las exportaciones de la Argentina, con un sistema 70/30 (70% de liquidación al tipo de cambio oficial y 30% al dólar contado con liquidación), lo que significó una mejora efectiva de entre 45 y 50% para los exportadores de carne.
El tercer y más importante factor fueron las lluvias que comenzaron el domingo y abarcaron la mayor parte de las zonas de producción agrícola y ganadera. Según explicó, esto genera expectativa de producción de forraje que estaba faltando. “Habiendo ya faenado más de 13% en relación a los dos años previos, ahora el productor querrá retener hacienda para aprovechar el pasto que viene después de la lluvia y ganar kilos”, explicó.