Podemos pensar en la extinción como un evento excepcional que súbitamente aniquila a animales como los dinosaurios y similares… Pero la realidad es que las especies desaparecen con alarmante regularidad.
De hecho, según el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, por sus siglas en inglés), una ONG de preservación de la vida silvestre, se cree que unas 10.000 especies se pierden para siempre cada año.
Sin embargo, el WWF dice que es difícil estar seguro de las cifras absolutas. Principalmente porque, para empezar, no sabemos cuántas especies existen.
Ya que mañana es el Día del Recuerdo de las Especies Perdidas, echemos un vistazo a unos cuantos animales que alguna vez prosperaron en el planeta y que ya no están.
Y también te presentamos a uno que “volvió de la muerte”.
1. Colobo rojo de Miss Waldron (Ghana y Costa de Marfil)
El colobo rojo de Zanzíbar es uno de los parientes más cercanos del desaparecido colobo rojo de Miss Waldron, que no ha sido visto oficialmente desde 1978.
Este mono de crin roja de tamaño mediano se ha considerado extinto desde principios de la década de 2000.
El colobo rojo de Miss Waldron, que vivía en la frontera entre Ghana y Costa de Marfil, no tenía pulgares.
Una criatura gentil, acostumbrada a vivir en grandes grupos en lo alto de las copas de los árboles, se vio obligada a cambiar su forma de vida cuando el hombre comenzó a acortar su hábitat.
A medida que los bosques se redujeron de tamaño, los grupos de colobos rojos se volvieron demasiado pequeños, lo que condujo a una menor protección contra los depredadores y a la debilidad genética causada por la reproducción endogámica.
2. Delfín del río Yangtsé (China)
Se cree que el delfín chino de río, también conocido como baiji, es uno de los mamíferos de agua dulce más antiguos.
Declarado extinto en 2006, el delfín chino del río Yangtsé tenía un sistema de ecolocalización altamente evolucionado, muy superior al de otros delfines.
Estaba tan bien configurado que podía identificar la posición de peces individuales.
Pero el río se llenó de botes de pescadores, barcos y contaminación humana, y no pudo sobrevivir.
3. Foca monje del Caribe (Isla Serranilla, entre Jamaica y Nicaragua)
Focas parecidas a esta solían vivir en el Caribe.
Esta especie de foca nativa del Caribe vivió alguna vez en el golfo de México, la costa este de América Central y las costas del norte de América del Sur.
Pero fue perseguida por el aceite que se puede extraer de su grasa, y la sobrepesca de sus fuentes de alimentos afectó gravemente a las sobrevivientes.
Fue vista por última vez en 1952 en la isla Serranilla, entre Jamaica y Nicaragua.
4. Mejillón de Alabama (Estados Unidos)
Los mejillones de río, como estos de República Checa, parecen más almejas gigantes.
Este humilde mejillón vivió en el río Mobile de Alabama, en EE.UU., hasta aproximadamente 2006.
Este molusco filtraba el agua contaminada del río, pero los niveles de polución se volvieron tan altos que el animal ya no pudo soportarlos.
La desaparición de esta simple criatura reveló verdades más oscuras sobre el agua, que se estaba llenando de productos químicos peligrosos de las fábricas y causando enfermedades fatales en la comunidad principalmente afroestadounidense que vivía junto a ella.
5. Dodo (Mauricio)
El dodo se convirtió en un símbolo de la extinción causada por humanos.
Es un extraño honor ser el ave extinta más famosa, pero por alguna razón el dodo es la única especie desaparecida, aparte de los dinosaurios, que casi todos conocen.
Esta ave no voladora de aspecto deslumbrante vivió en la isla de Mauricio, sin depredadores naturales.
Cuando los humanos llegaron al país insular del océano Índico, trayendo consigo otros animales y su propio apetito por la carne, el dodo no duró mucho.
El último ejemplar desapareció a finales de 1700.
6. Vaca marina (Mar de Bering, entre Alaska y Rusia)
El naturalista alemán George Steller naufragó en la isla de Bering, ubicada al noreste de Rusia, en 1741 y observó a esta maravillosa criatura antes de que la cazaran hasta la extinción.
La vaca marina de Steller, pariente del manatí, podía medir hasta nueve metros de largo.
Su notable aspecto, piel formidable y toda esa grasa valiosa la convirtieron en objetivo de los cazadores: aparentemente sabía a carne de res marinada en aceite de almendras.
Se cree que fue eliminada por una combinación de caza y cambios en su entorno de alimentación, no mucho después de la desaparición del dodo.
7. Cuaga (Sudáfrica)
La última cuaga murió en el zoológico de Artis de Ámsterdam en agosto de 1883.
La belleza inusual de la pobre cuaga fue la razón de su extinción.
La mitad frontal de este animal africano era rayada como la de una cebra, pero su mitad inferior era marrón como la de un caballo.
El equino fue aniquilado hasta la extinción por cazadores furtivos que apreciaban su aspecto extraño, y el último de ellos murió en cautiverio en la década de 1880.
La última cuaga murió en el zoológico de Artis de Ámsterdam en agosto de 1883.
La belleza inusual de la pobre cuaga fue la razón de su extinción.
La mitad frontal de este animal africano era rayada como la de una cebra, pero su mitad inferior era marrón como la de un caballo.
El equino fue aniquilado hasta la extinción por cazadores furtivos que apreciaban su aspecto extraño, y el último de ellos murió en cautiverio en la década de 1880.
8. Alce irlandés (Irlanda)
El alce irlandés era como un alce común, solo que mucho, mucho más grande.
Muchos de los animales extintos más notables eran similares a las especies que todavía existen hoy, pero un poco más extraños.
El alce irlandés, o ciervo irlandés, se parece mucho a los alces que aún viven, excepto por el hecho de que medía más de dos metros de altura y que sus astas se extendían hasta los 3,65 m.
Se extinguió hace unos 7.700 años, posiblemente por la caza y cambios climáticos.
9. El que volvió de la extinción: águila de cola blanca (Reino Unido)
Un águila de cola blanca pescando en Noruega.
Para terminar con un apunte feliz, está el caso del águila de cola blanca, la que se había extinguido en Reino Unido a inicios del siglo XX… pero no por mucho tiempo.
Esta magnifica ave, que con las alas extendidas podía llegar a medir más de dos metros, fue brutalmente cazada en Gran Bretaña durante años. De hecho, su caza era activamente promocionada.
Y cuando matar pájaros fue declarado ilegal, ya era demasiado tarde para evitar su extinción.
Afortunadamente, algunas águilas de cola blanca se conservaban en otras partes de Europa y la especie pudo ser reintroducida en Reino Unido.
Pero no todos los animales tienen una segunda oportunidad.