El exministro de Economía se reunió con los legisladores de Unión por la Patria para analizar el extenso alcance del decreto presidencial anunciado.
Entre los temas tratados se revisó el alcance del decreto de necesidad y urgencia (DNU) en materia de consumo.
El impacto de las decisiones en materia tributaria y los anuncios que llevarían a incrementar la presión fiscal hicieron que los presentes definan como “impuestazo” al paquete de medidas.
Por ejemplo, se elevó la alícuota del impuesto PAÍS al 17,5% para pagar importaciones de bienes y fletes, se anunció una generalización de alícuotas de DEX del 15% para todos los productos (excepto complejo soja, que se incrementaría al 33%) y la propuesta de volver atrás con el beneficio del impuesto a las ganancias para trabajadores y jubilados.
El incremento de la presión fiscal de todo el paquete de medidas se proyecta en 2,36% del PIB, lo cual implica una mayor carga tributaria para los trabajadores, jubilados, monotributistas pero también para las Pymes, las economías regionales y la industria.