Cada 16 de febrero se celebra a este fruto seco para difundir sus beneficios nutricionales. Cuáles son sus aportes más importantes. 3 recetas dulces y saladas para celebrarlo en cualquier momento
La almendra es un fruto seco de origen mediterráneo con una historia que se remonta a tiempos antiguos. Los almendros, inicialmente creciendo de forma salvaje en la región, fueron cultivados ya en el año 3000 a.C. Incluso se encuentran menciones de las almendras en el libro del Génesis, el primer libro de la Biblia, como un manjar digno de obsequiar.
Cada 16 de febrero se celebra el Día Mundial de la Almendra como una forma de destacar sus beneficios nutricionales y también los económicos.
Según la Escuela de Salud Pública T.H. Chan de la Universidad de Harvard una porción de almendras equivale a 28 gramos, aproximadamente 23 almendras o ¼ de taza, proporciona alrededor de 165 calorías, 6 gramos de proteína, 14 gramos de grasa (80% monoinsaturada, 15% poliinsaturada y 5% saturada), 6 gramos de carbohidratos y 3 gramos de fibra. “Es un alimento rico en calorías pero también rico en nutrientes, ya que la mayoría de sus grasas son monoinsaturadas”, destaca en su página web.
Además, según los mismos especialistas de Harvard, aún cuando los frutos secos en general tienen abundantes calorías “las investigaciones no respaldan un vínculo entre el consumo de frutos secos y el aumento de peso. De hecho, se han asociado con un menor aumento de peso y un menor riesgo de obesidad, posiblemente porque el contenido de grasas y fibra ayuda a mejorar la sensación de satisfacción y saciedad”.