Alrededor de 1,8 millones de estudiantes de escuelas estatales pueden verse afectados por la medida de fuerza impulsada por CTERA en reclamo de mejoras salariales y en rechazo a los recortes de fondos nacionales para el FONID, jornada extendida y comedores escolares
Este lunes empiezan las clases para unos 3,3 millones de chicos que van a la escuela en la Ciudad de Buenos Aires y en las provincias de Córdoba, Corrientes, Entre Ríos, Formosa, Mendoza, San Luis y Santa Fe. Sin embargo, el paro docente previsto en 5 de las 8 jurisdicciones implica que alrededor de 1,8 millones –los alumnos que asisten al sistema estatal– quizás encuentren sus escuelas cerradas.
En CABA y en Córdoba, los principales gremios docentes también adhieren a la medida de fuerza, pero en esas jurisdicciones tiene más peso el sector privado (alrededor del 33% de la matrícula en Córdoba y el 49% en CABA), que no se verá afectado.
Por otro lado, se prevé un inicio de clases normal en las provincias de Mendoza (donde el gremio SUTE convocó a una marcha pero no al paro activo), San Luis (donde solo uno de los cinco gremios adhiere a la huelga) y Formosa (donde los gremios mayoritarios no participarán de la medida de fuerza).
Salta, Jujuy y Catamarca– que iban a empezar las clases el lunes 26 según el calendario escolar, pero decidieron en estos días postergar el comienzo al 4 de marzo por el escenario de incertidumbre generado por las medidas del Gobierno nacional.
Las huelgas provinciales responden a una medida nacional definida el jueves pasado por la Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (CTERA) en reclamo de un aumento salarial y en rechazo a la eliminación del Fondo Nacional de Incentivo Docente (FONID) y el Fondo de Compensación Salarial y los recortes en las partidas nacionales para programas educativos (incluyendo la jornada extendida), infraestructura y comedores escolares.