La Universidad Nacional de Jujuy se declaró en “emergencia financiera y edilicia”, mientras que la de Santiago del Estero se encuentra en “estado de asamblea universitaria permanente”.
El congelamiento presupuestario de las universidades nacionales, a raíz de la decisión del Gobierno nacional de prorrogar el Presupuesto 2023, puso a las casas de estudios en un estado de gravedad económica y financiera, en un escenario inflacionario que este año superaría el 200%, de acuerdo a varias consultoras. La Universidad Nacional de Jujuy (UNJU) se declaró en emergencia financiera y edilicia, su par de Santiago del Estero (UNSE) se declaró en estado de asamblea universitaria permanente, mientras que desde la salteña UNSA, su rector advirtió que el escenario es “complejo y difícil”.
La visibilización de este cuadro se producirá el próximo jueves 14, cuando se realice el paro nacional de docentes y no docentes que se organizaron en el Frente Sindical de las Universidades Nacionales (CONADU Histórica, CONADU, FEDUN, FAGDUT, UDA, CTERA y FATUN). En un comunicado conjunto, indicaron que es “una respuesta de unidad estratégica con un plan de acción nacional que encauce el malestar, los reclamos y sea eficaz para lograr los objetivos”. También denunciaron la crisis salarial del sector: “Hemos perdido más de un 50% del salario desde el mes de diciembre 2023”. Y plantearon la crítica situación de las instituciones “producto del congelamiento presupuestario dispuesto por el Gobierno”.
El Consejo Superior de la UNJU sesionó el último miércoles y declaró la “emergencia financiera y edilicia”. En las últimas horas, a través de un comunicado que se difundió a los medios, el rector Mario Bonillo, confirmó que esa casa de estudios “atraviesa un momento económico complejo”, pero indicó que su funcionamiento está asegurado. Advirtió que las partidas están garantizadas por la Ley de Educación Superior y por la Constitución Nacional y por lo tanto, “el Estado nacional se tiene que encargar de financiar nuestro funcionamiento”.
El funcionario detalló que por los retrasos financieros que ya afectaban de manera considerable las actividades, “la actualización necesaria de los fondos no debería ser inferior al 300%”. Finalmente, Bonillo advirtió que, pese a las dificultades, “de ninguna manera se piensa en recurrir a alguna forma de arancelamiento”, pero sí a la coordinación de apoyos de otros organismos nacionales y del propio Gobierno de la provincia.
En el caso de Santiago del Estero, en la UNSE se constituyó la Asamblea Universitaria Permanente, espacio que se reunió en el salón de usos múltiples de la Facultad de Humanidades de la UNSE y que contó con la participación de más de 250 trabajadores docentes, no docentes, estudiantes, investigadores y becarios nucleados en diferentes institutos. Terminado el encuentro se difundió un documento en el que, entre otras consideraciones, señala que “la Asamblea ve con preocupación cómo la universidad pública y el sistema de ciencia y tecnología están siendo afectados por las políticas de recortes impulsadas por el Gobierno nacional y la proliferación de discursos anticientíficos y antiacadémicos que promueven argumentos falsos sobre la supuesta irrelevancia de carreras vinculadas a las ciencias sociales”. El gremio docente, ADUNSE, que conduce Santiago Comán, confirmó que el par del jueves será con movilización pero sin asistencia a los lugares de trabajo.