Familiares, allegados y vecinos participaron esta noche de una marcha para pedir justicia por la
muerte de un niño de diez años, fallecido tras haber quedado en medio de un tiroteo entre un policía de civil y dos motochorros en la localidad bonaerense de Wilde.
La manifestación se llevó a cabo en la intersección de Caxaraville y Rondeau, la misma esquina donde se produjo el episodio, en el partido de Avellaneda.
Allí, y bajo la consigna “Bastián Escalante, víctima de la inseguridad”, cientos de personas marcharon para pedirle a las autoridades el esclarecimiento del hecho y más seguridad en la
zona.
Bastián murió el jueves en un hospital local luego de varias horas de agonía, tras haber sido alcanzado por dos balazos, en medio de un tiroteo entre y un policía y dos delincuentes.
Por el hecho fueron detenidos dos jóvenes de 18 y 16 años como sospechosos de haber cometido el intento de asalto, y el policía que los enfrentó, ante las sospechas de que los disparos mortales fueron realizados con su arma.