“Siempre alguien toca la puerta con hambre” el incansable trabajo del Merendero a Pulmón
Delia Vargas, referente del Merendero a Pulmón en el barrio Malvinas, relata cómo sostienen su labor comunitaria en plena temporada invernal. Ropa, alimentos y una mano solidaria, las claves para atravesar el frío.
En medio de una temporada marcada por las bajas temperaturas, el esfuerzo silencioso de muchos espacios comunitarios cobra más relevancia que nunca. Uno de ellos es el Merendero a Pulmón, ubicado en el barrio Malvinas, donde Delia Vargas lidera un trabajo esencial para ayudar a quienes más lo necesitan. “Recibimos ropa de abrigo, calzado, todo lo que la gente ya no usa pero que todavía puede ser útil. Así las familias pueden enfrentar el frío”, cuenta Delia, en diálogo con Provincia Multimedios.
Además de la ropa, también entregan alimentos: meriendas todos los días y almuerzo una vez por semana. “Todo lo que la gente pueda donar es bienvenido, porque vivimos el día a día. Siempre necesitamos la colaboración de todos”, explica.
El merendero no está solo. Cuenta con voluntarios que ayudan con el traslado de donaciones y la organización de la comida. Incluso hay personas que colaboran con transferencias bancarias, una forma práctica y rápida de sumar su aporte.
“Siempre alguien toca la puerta con hambre. Y aunque no estemos en horario de merienda, tratamos de tener algo para ofrecer”, dice Delia, agradeciendo a quienes acercan galletitas, pan o cualquier cosa que ayude a llenar una pancita.
El Merendero a Pulmón está ubicado en Puerto Argentino, entre calle Chaile y Torres, en el asentamiento 16 de Marzo del barrio Malvinas. También pueden encontrarlos en redes sociales como MerenderoAPulmon en Facebook e Instagram, o por Google Maps. “Agradezco a todos los que nos ayudan. Siempre hay alguien dispuesto a dar una mano. Y eso nos da fuerzas para seguir”, concluye Delia.
