El Gobierno definió una nueva pauta de 5% de aumento mensual por 90 días para el programa Precios Justos. Hay fuerte malestar en las empresas, que anticipan faltantes. Los pequeños comercios ya recibieron listas con altas subas
“Subimos los precios y cortamos cuotas”, se sinceraron en un importante retail de artículos para el hogar. En otra cadena agregaron: “Teníamos una promo para el Día del Niño, con una serie de productos. Evaluamos darla de baja hasta tener más claro el escenario de precios y luego se resolvió mantenerla, pero sin las 6 cuotas o más sin interés”.
Tras sus análisis de costos, muchas empresas ya ajustaron sus listas de precios y enviaron a sus clientes aumentos de entre 15% y 30%, según el rubro y el producto. Advierten que a la inflación (de 6,3% en julio) y al impuesto PAIS del 7,5%, que afecta a todos los bienes importados salvo contadas excepciones, se le sumó ahora la suba de 22% del dólar oficial del lunes, lo que generó un fuerte incremento de costos que debe, según las compañías, ser trasladado a las góndolas.
La decisión fue comunicada primero a los supermercados de la Asociación de Supermercados Unidos (ASU) y a los mayoristas reunidos en la Cámara Argentina de Distribuidores y Autoservicios Mayoristas (Cadam) y posteriormente a algunas empresas que tenían turno para asistir ayer a la Secretaría. Más tarde, con la mayoría de las negociaciones aún sin arrancar, el Gobierno hizo el anuncio en una rueda de prensa. “Es una tomada de pelo. Si uno acuerda ese 5%, no nos cobran el impuesto PAIS. Pero se olvidan de la inflación y de la devaluación”, dijo un empresario de consumo masivo, quien anticipó que faltará mercadería en las góndolas en los próximos meses.
A pesar de saber que las cadenas no aceptarían ningún incremento que no esté acordado con el Gobierno, muchas firmas ya le habían transmitido al canal moderno que los incrementos oscilarían entre 15 y 20 por ciento.
Fuentes del supermercadismo confirmaron a este medio que son varias las empresas que ya pasaron sus listas con aumentos a la espera de poder ser aplicadas tras la negociación con el Gobierno. Algunos mayoristas, de Capital Federal y del interior del país, confirmaron que varios proveedores les transmitieron que los aumentos rondarán en los porcentajes mencionados y otros directamente ya mandaron los ajustes para ser considerados.
En cuanto a las entregas, se están realizando las que corresponden a órdenes de compra emitidas la semana pasada. Las cadenas no pueden emitir órdenes nuevas al precio vigente, sino que deben esperar a que la nueva lista esté autorizada por el Gobierno. En el actual contexto, si no hay cambios y acuerdos con los privados en torno a un mayor porcentaje de aumento, la consecuencia será el freno en las entregas, como ya viene ocurriendo desde hace tiempo con algunas firmas.