¿Sabías que alberga el segundo lago interior más grande de Europa? Y para llegar a él tendrás que bajar más de 600 escalones.
Al noroeste de la isla de Cerdeña, a unos 24 kilómetros de la ciudad de Alguer, un pescador llamado Ferrandino fue quien descubrió allá por el siglo XVIII la abertura que daría lugar al hallazgo de un complejo sistema de cuevas que se extienden unos 4 kilómetros.
Un lugar que visitar una vez en la vida
En su interior encontrarás una de las cuevas marinas más grandes de Italia y una de las joyas de la naturaleza más cautivadoras del Mediterráneo. La gruta o cueva de Neptuno, que se formó hace unos dos millones de años cuenta con espectaculares formaciones kársticas, una playa de arena blanca y un enorme lago subterráneo. Representan una de las principales atracciones turísticas de Algher y también un sitio de gran interés científico.
No todo el complejo de cuevas está abierto al público (de hecho, el público general solo puede ver unos cientos de metros cuya visita dura, en general, algo más de una hora). Algunas partes, consideradas más peligrosas, están reservadas para espeleólogos expertos, pero a diferencia de muchas otras cuevas ubicadas en Cerdeña, la Gruta de Neptuno ha sido explorada en su totalidad.
Tanto si llegas a las cuevas a pie (por las escaleras, que son 656 escalones) como en barco, llegarás al mismo punto de entrada y comenzarás tu visita guiada por el lugar, que te mostrará varias salas excavadas en la piedra caliza por siglos de goteo de agua. La entrada es un pasaje cubierto por concreciones de vegetación y denso con estalactitas y estalagmitas.
En la primera sala de la impresionante cueva encontraremos el famoso lago de La Marmora, una de las cuencas de agua salada más grandes de Europa (de unos 120 metros de largo por 25 metros de ancho), acompañado de varias estalactitas y estalagmitas que decoran el lugar. El lago subterráneo más grande de Europa es San Leonardo en Suiza con 260 metros de largo y cuyas aguas se mantienen a una temperatura constante de 11 ºC.
Una vez dentro, en el fondo del lago, una formación distintiva de estalagmitas llamada “árbol de Navidad” se destaca entre grandes coladas y festones calcíticos. Es un rincón habitual donde hacer fotografías que pasen a la posteridad.
En el centro de la cueva se encuentra la imponente estalagmita de unos 2 metros llamada fuente de agua bendita (acquasantiera). El nombre probablemente se deba a que gracias a su particular forma, recoge el agua de lluvia convirtiéndose en una especie de abrevadero natural para las aves que aquí anidan.
El lago cuenta incluso con una pequeña playa de arena, llamada Spiaggia dei ciottolini (playa de los guijarros).
El itinerario -solo se puede acceder a la cueva mediante visitas turísticas guiadas- finaliza con una visita a la sala – Tribuna della Musica – un sugerente balcón desde el que se puede disfrutar de la vista de la zona de Reggia y del lago Lamarmora desde lo alto.
En el cine
Las cuevas sirvieron como plató de cine en el pasado. En 1978 se rodó allí ‘La isla de los hombres peces’, con escenas que recuerdan a los cuentos del famoso y visionario escritor y poeta francés Julio Verne. Una película de terror y aventuras con un guión adaptado de relatos del escritor estadounidense de relatos y novelas de terror y ciencia ficción H.P. Lovecraft que muestra la existencia de unas misteriosas criaturas que matan a todo aquel que se acerque a sus aguas dulces.