El poder de adaptación de estos zuecos, que ahora exploran también su papel en looks mucho más elevados que de costumbre (acompañando vestidos de tul y tafeta, además de conjuntos plagados de pedrería), en un ejercicio sin precedentes que avala la ya célebre teoría del zapato equivocado (ésa que apuesta por descontextualizar looks y calzado a base de antítesis estilísticas).
Por lo de pronto, los Crocs, ya cuentan con un buen ejército de seguidoras y todo hace presagiar que su hegemonía no hará más que consolidarse la próxima primavera/verano 2024, con nuevos diseños y sorpresas como la que ya nos ha brindado Londres. Así que ya lo sabes, si todavía no te has atrevido con ellos, la temporada que viene parece la excusa perfecta para experimentar con los zuecos, ya sea con los clásicos, o con los de plataforma.