El consenso entre los expertos señala que, a corto plazo, el panorama para el sector productivo no presenta mejoras evidentes. Para revertir esta situación, será esencial reducir la inflación y avanzar en la recomposición salarial, el acceso al crédito y las inversiones.
En el cierre del 2023, la actividad industrial experimentó una nueva caída, marcando una disminución generalizada, según indican distintos informes sobre el sector.
A la espera del próximo informe del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) programado para este martes, los principales indicadores de la industria adelantan variaciones negativas. La contracción en el consumo y la construcción, derivadas de la devaluación y el cambio de gobierno, se erigen como factores determinantes.
El consenso entre los expertos señala que, a corto plazo, el panorama para el sector productivo no presenta mejoras evidentes. Para revertir esta situación, será esencial reducir la inflación y avanzar en la recomposición salarial, el acceso al crédito y las inversiones.
Duro pronóstico de los privados para la industria en 2024
El Índice de Producción Industrial (IPI) de la consultora Orlando Ferreres & Asociados reflejó una caída del 6,4% en la producción industrial en diciembre en comparación con el mismo mes del año anterior. En el acumulado de 2023, se registró una disminución del 1,7%. En términos desestacionalizados, se observó una baja mensual del 0,5%. Al desglosar por categorías, se destacó una “fuerte contracción” en la industria de metales básicos, seguida de nuevas reducciones en alimentos y minerales no metálicos, dos sectores que mostraron las mayores disminuciones a lo largo del año.
En el sector metalúrgico, Ferreres resaltó las dificultades para acceder a insumos y materias primas importadas, afectando la actividad productiva durante más de seis meses. En el ámbito alimentario, la explicación se relacionó con el bajo nivel de granos para la molienda y la disminución de la faena bovina, en un contexto donde los productores restringieron la oferta debido a la incertidumbre del cambio de gobierno, los anuncios macroeconómicos y la devaluación del peso.