Ayer se conoció el dato de la inflación y, con él, la valorización mensual de la canasta básica que también elabora el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC). La medición arrojó que una familia tipo requirió más de $770 mil para no pasar la línea de la pobreza.La inflación de marzo fue del 11%, según informó el INDEC ayer. A la vez, el Instituto publicó la valorización de la canasta básica, consistente en medir los precios de una serie de bienes básicos para la subsistencia de un adulto promedio y de los grupos familiares del país, diferenciados por cantidad de integrantes.
Cabe recordar que, mientras que la Canasta Básica Alimentaria (CBA) mide los gastos necesarios para cubrir la alimentación familiar, y es la que determina la línea de indigencia, la Total (CBT) añade otros bienes básicos que trascienden a los alimentos y define la línea de pobreza.
Con estas variaciones, la CBT para una familia tipo, de cuatro integrantes, se colocó en $773.385,10, significando esto que cualquier familia que perciba ingresos menores a ese monto es considerada pobre según los parámetros oficiales. A su vez, ese valor equivale a casi cuatro veces el salario mínimo, vital y móvil (SMVM), fijado actualmente en $202.800. Si se piensa en un hogar con dos adultos y dos niños, como establece el modelo del INDEC, ambos mayores se quedarían cortos si sólo cobraran, cada uno, un SMVM.
Por otro lado, un adulto solo necesitó, según el INDEC, $115.873,35 para no ser considerado indigente y $250.286,44 para no calificar como pobre. En el caso de los hogares de cinco integrantes, la CBA se estimó en $376.588,39 y la CBT en $813.430,93.