El reclamo de los trabajadores del puerto de Coronel detiene circulación de exportaciones y productores argentinos recurren a la vía judicial para destrabar la situación
Las movilizaciones que desde hace 50 días llevan a cabo trabajadores del puerto de Coronel, el mayor terminal marítima de la región chilena del Biobío, en el Pacífico, han puesto en alerta a las autoridades de los dos lados de la cordillera por las pérdidas millonarias que el bloqueo está causando en las exportaciones de la fruta argentina y apuntan a un posible nuevo punto de conflicto entre ambos Gobiernos.
“Hemos gestionado tres mesas de diálogo con el fin de poder resolver el conflicto, pero sin éxito. Tenemos interés en que el puerto pueda retomar sus funciones y por lo mismo hemos realizado múltiples llamados a las autoridades y al Gobierno para que aseguren el orden público y ante delitos flagrantes actúen con decisión”, señaló en un comunicado la compañía.
Los trabajadores indican que entre las razones del paro se encuentra la eliminación de 40.000 turnos laborales al año, situación que, según denuncian, podría repercutir en la destrucción de los sindicatos eventuales, el impago del sueldo mínimo garantizado y la no tramitación de licencias médicas. Además, otro foco de tensión fue la aplicación de un nuevo protocolo de control de uso de drogas y alcohol dentro de las instalaciones portuarias.