Entre la noche del jueves y la madrugada del viernes, otro acto de violencia volvió a aterrorizar Rosario. Unas tres o cuatro personas fueron hasta el Jardín de Infantes 209 Noemi Fontana -ubicado en la calle Felipe Moré al 2200- y pegaron tiros contra la fachada. Horas más tarde se supo que un episodio similar tuvo lugar en la Escuela 1202 “Gendarmería Nacional”, de la calle Constitución al 3200. En los dos lugares dejaron cartas amenazantes.
Entre la noche del jueves y la madrugada del viernes, otro acto de violencia volvió a aterrorizar Rosario. Unas tres o cuatro personas fueron hasta el Jardín de Infantes 209 Noemi Fontana -ubicado en la calle Felipe Moré al 2200- y pegaron tiros contra la fachada. Horas más tarde se supo que un episodio similar tuvo lugar en la Escuela 1202 “Gendarmería Nacional”, de la calle Constitución al 3200. En los dos lugares dejaron cartas amenazantes.
n el Jardín, una situación similar se dio alrededor de las 23 del jueves. Según los primeros testimonios, vieron a tres o cuatro personas pasar frente al edificio caminando y dispararon unas cinco veces, según las marcas de los proyectiles que quedaron impresas en la pared.
Esta no es la primera vez que balean escuelas en Rosario. Estos nuevos ataques se dieron luego de que el gobernador santafesino Maximiliano Pullaro apuntara contra las organizaciones delictivas y las acusara de seguir manejando las bandas incluso estando presos.
El pasado 19 de marzo, Luis Petri fue en persona a la ciudad de Rosario para monitorear un importante operativo de las Fuerzas Armadas para combatir el narcotráfico que aterroriza a la ciudad. Tanto él como la ministra Bullrich estuvieron presentes en Rosario en plena ola de asesinatos y horror que tuvo lugar en marzo para manifestar el apoyo del gobierno nacional al provincial, aunque los hechos de esta índole parecen no detenerse