Una jueza federal debe expedirse tras el amparo que presentó parte de la oposición para frenar la designación de Martín Doñate, impulsada por Cristina Kirchner.
La maniobra del kirchnerismo para mantener un integrante extra en el Consejo de la Magistratura quedó en manos de la Justicia, que deberá expedirse tras la presentación realizada por senadores del PRO para frenar la jura de Martín Doñate en el cuerpo encargado de designar y controlar a los jueces.
El último miércoles, Cristina Kirchner instruyó al oficialismo en la Cámara alta a desconocer el fallo -resuelto por la Corte Suprema- que restituía a Luis Juez en la Magistratura. La respuesta de la oposición llegó dos días más tarde: el senador cordobés, junto a su par Humberto Schiavoni, interpuso una medida cautelar y el conflicto va escalando.
En la presentación, que consta de 29 páginas, los legisladores del PRO reclaman que “se declare la nulidad absoluta e insanable” de los nombramientos dadas “las improcedentes designaciones de los senadores Doñate y (Anabel) Fernández Sagasti”.
El tema quedó en manos del Juzgado en lo Contencioso Administrativo Federal N° 5, a cargo de María Alejandra Biotti, magistrada que en 2020 pidió al Senado frenar la revisión de los traslados de los camaristas Pablo Bertuzzi y Leopoldo Bruglia impulsada desde el kirchnerismo.
La disputa se originó luego de que el interbloque del Frente de Todos decidiera dividirse en dos para así lograr tres de las cuatro bancas que le corresponden al Senado en el organismo. La maniobra implicó que Juez quedara afuera del Consejo y que en su lugar ingresara Doñate.
Hace unos días la Corte Suprema falló en favor de la demanda de la oposición, pero Cristina Kirchner ideó una jugada para fortalecer su influencia en la esfera judicial. Volvió a designar a Doñate como consejero y, para darle mayor volumen político al decreto, lo sometió a votación en el Senado, cosa que se logró el pasado jueves.
El máximo tribunal, luego de que la Vicepresidenta desobedeciera el fallo, decide ahora esperar el desenvolvimiento del conflicto de poderes entre el kirchnerismo y la oposición. Mientras tanto, todas las miradas están puestas sobre Horacio Rosatti, presidente del máximo tribunal y que también forma parte de ese cuerpo judicial.
Hasta abril de este año, el Frente de Todos era un solo bloque en el Senado. Se partió en dos por orden de la Vicepresidenta y se creó el bloque Unidad Ciudadana. De esta forma, el primer bloque (mayoritario en la Cámara) se llevó dos consejeros, la UCR como primera minoría se llevó uno y el bloque K, como nueva segunda minoría, se quedó con el último.
El Frente de Todos argumentó que el fallo de la Corte solo corre para la composición actual de la Magistratura, cuyo mandato finaliza este viernes. Por eso, durante la semana votó el decreto parlamentario en el que insistió con Doñate, que se desempeña desde 2019 como senador nacional por Río Negro y responde a La Cámpora.
Las designaciones suelen ser enviadas por la Cámara sin necesidad de una votación: el oficialismo quiso blindar el nombramiento, adelantándose a un rechazo de la Corte Suprema, que ahora -según la interpretación K- iría contra el cuerpo legislativo luego de que este aprobara una decisión por mayoría.